Imagen personal: mucho más que moda o tendencias

Durante mucho tiempo se nos hizo creer que tener "estilo" era sinónimo de seguir la moda, combinar colores según la temporada o ajustarse a ciertos moldes estéticos. Pero cuando te detienes, respiras, y comienzas a escucharte… entiendes que la verdadera imagen personal no viene de afuera, sino de adentro.
La imagen no es disfraz.
No es máscara.
No es imitación.
La imagen es presencia.
Es cuerpo habitado, energía visible, lenguaje silencioso que habla de quién eres sin necesidad de decirlo.
El estilo personal no se compra, se recuerda
Tu estilo no está en la vitrina de una tienda.
Está en tu historia, tus símbolos, tu forma de caminar por el mundo.
Está en lo que elegiste cuando no te importaba "encajar", cuando te sentías libre, cuando vestías desde el juego o la intuición.
Recuperar tu estilo personal es un acto de memoria interna.
Es preguntarte:
– ¿Qué me hace sentir en casa?
– ¿Con qué me reconozco?
– ¿Qué versión de mí estoy lista para manifestar?
Vestirse como ritual, no como rutina
Cada día podemos vestirnos desde la prisa… o desde la intención.
Desde el juicio… o desde la escucha.
Desde la moda… o desde el alma.
Vestirte puede ser un ritual silencioso para recordarte lo que vales, lo que sientes, lo que necesitas.
Porque cuando eliges una prenda con conciencia, no solo cubres tu cuerpo:
revelas tu energía.
La imagen como puente hacia tu autenticidad
En mi trabajo, no busco cambiar cómo te ves.
Busco ayudarte a reconocer quién eres.
Tu imagen puede ser tu aliada más poderosa cuando está en coherencia con tu voz, tu sentir, tu momento vital.
No se trata de que "te veas bien".
Se trata de que te sientas tú.
Y ese es el verdadero arte:✨ El arte de ser tú.
Con cariño Paz Pimont